Nueva funcionalidad: lectura rápida
Hoy procesamos la información rápidamente. Antes de invertir tiempo leyendo una nota escaneamos su contenido para determinar si merece la pena la inversión de tiempo, sino pasamos a otra página en busca de nuestro objetivo.
La teoría del rastreo de la información indica que los usuarios de Internet se comportan de la misma manera que un animal salvaje en busca de comida. Tienen un objetivo claro y empiezan su búsqueda buscando rastros de lo que necesitan. Cualquier rastro (link, texto, imagen) que les permita realizar un progreso hacia su objetivo será seguido, mientras que cualquier elemento que sea percibido como no relevante o molesto (anuncios no relevantes, contenidos que parecen una cosa pero son otra…) es ignorada.
Ya en el Siglo 19 se analizaba el comportamiento de los lectores, pero con el advenimiento de la tecnología de rastreo de la lectura (Eyetracking) en la década de los 90 se demostró con una precisión absoluta que los usuarios “saltan” de sector en sector de una misma nota tratando de encontrar los puntos relevantes que, en el menor tiempo posible, les permitan armar la historia.
Durante una sesión de brainstorming en Iconosur acerca del tema, Agustin D’Elia nuestro experto en tecnología, conectó una idea y una solución: “Desde siempre los Periodistas vienen resaltando los contenidos importantes de los textos, en Internet estas marcas pueden ser detectadas, extraídas y reagrupadas” Pensó.
Así surgió la nueva funcionalidad de Lectura Rápida, luego vino la discusión de que hacer con el texto intermedio y llegamos a la conclusión que la mejor opción sería tener la posibilidad de expandirlo a pedido del usuario.
Creamos una primera versión de la funcionalidad y la probamos sobre textos de BigBangNews.com sin darle aviso a los Periodistas y funcionó. La nota reducida a sus elementos destacados se entendía. Pero debíamos probarlo con usuarios reales.
Para el testeo creamos 2 notas en ambas versiones. Lenta y rápida. Pedimos a los usuarios que leyeran cada uno una versión distinta y que avisaran una vez que hubieran terminado. El resultado fue que los usuarios de la versión rápida terminaban de leer mucho más rápido que los de la nota completa y si bien no tenían el mismo detalle informativo que sus compañeros, podían explicar perfectamente el contenido esencial de la historia.
La teoría fue la correcta y la herramienta funciona técnicamente. Ahora es cuestión que los Periodistas tengan en cuenta que sus notas peden ser leídas en ambos modos para elegir que resaltar de la historia.